viernes, 22 de febrero de 2008

6 minutos de silencio...

Seis muertos, entre ellos 4 menores de edad dejó el choque entre una camioneta Navigator y un auto Honda Accord, en Bosque Esmeralda, en Atizapán, Estado de México... Al parecer la camioneta era conducida a exceso de velocidad por un joven identificado como Isidro de 17 años, con el que viajaban Pamela, Daniel y Andrea de 17 y 16 años, todos estudiantes del Instituto Patria... Tras saltar el camellón, la camioneta derribó un árbol ,cayo encima del Honda y se partió en dos... Los cuerpos de los tripulantes de la parte trasera de la camioneta salieron disparos y se estrellaron contra el pavimento, las 6 personas murieron al instante... En el Honda fallecieron el chofer Ricardo Mendiola y el jardinero Julio, quien era llevado al médico...
Vaya historia, en segundos 6 familias sufren por esta tragedia... No conocí a ninguno de los fallecidos, o quizás en algún momento nos cruzamos en el periférico, o en un cine, o en un estadio de futbol, o esperando un taxi... Lo cierto es que estas 6 personas tenían la línea trazada... ¿qué hacía un joven de 17 años conduciendo una lujosa y potente camioneta navigator?,¿Se habrán ido de pinta?, ¿el jardinero julio presentía su muerte? ¿tendrían tiempo de cumplir con la misión de vida?, preguntas, preguntas y cuestionamientos por un hecho que vivo de lejos, pero que de cerca me hace reflexionar lo efímera que es la vida, lo fácil que podemos perderlo todo por una irresponsabilidad, palabra clave... Irresponsabilidad, ¿de quién? de los padres, de los jòvenes, de las escuelas, del dinero, del destino, no lo sé... Lo cierto es que estas experiencias para muchos de nosotros ajenas, se convierten en lecciones de vida, aunque nadie experimenta en cabeza ajena este y muchos ejemplos nos hacen cuestionarnos con quien andan los jòvenes, qué hacen, cómo lo hacen... ¿destino o lección? eso, cada quien lo determina... Para estas familias mi solidaridad... Un minuto de silencio por cada uno de ellos... Y muchos más para que lo que hoy se muera, por lo menos hoy sea la irresponsabilidad...

3 comentarios:

Alberto dijo...

Irresponsabilidad? De quien sea!!! El hecho es que es impactante saber de un accidente así y del cual debemos aprender para sensibilizar sobre muchas cosas, particularmente de la velocidad con la que debemos manejar, queda claro que para tantas muertes debió ir a una velocidad endemoniada y una vez mas fue factor para esta horrible consecuencia!

Arelí te felicito por tu talento, eres una persona muy capaz y me da mucho gusto saber que también eres muy sensible, animo!

Anónimo dijo...

Es una pena lo que le paso a estas 6 personas, definitivamente no es culpa de los padres del chico que iba manejando pues éste seguramente tendría licencia o permiso de manejo (hoy en día cualquier chamaco lo tiene y más con una camioneta de más de 70 mil USD, la responsabilidad definitivamente fue de quien iba manejando. Yo desde los 15 años manejo (tengo 40) y nunca fui irresponsable con el vehículo, así como muchos, muchisimos más que tuvimos y tienen la responsabilidad de manejar a tan temprana edad. Mi más sentido pésame y pronta resignación para los familiares.

Octavio dijo...

Julio y Ricardo eran empleados de una amiga mia. Ella los esperó inutilmente en una clínica en satélite. Los requirió inutilmente por celular, por nextel. Jamás le respondieron. Molesta regresaba a su casa, solo para ser detenida por un intenso e inusual tráfico. Un accidente, dijeron los policias que respondieron sus dudas. Una lincoln y un accord, agregaron, cuando ella preguntó que coches estaban involucrados. La descripción del accord y una ojeada los vehículos protagonistas precedieron a su crisis nerviosa. Ricardo, el empleado antiguo y fiel, de 35 años, dejó un pequeño de 9 años en la orfandad y una mujer viuda. De Julio desconozco. Mis hijos de 7 y de 10 años y mi mujer transitan diario, a esa hora, por ese lugar de regreso de la escuela. Ese preciso día, por un compromiso escolar, debieron tomar otro camino. Una tragedia absurda, que desde cualquier óptica debió evitarse. Pudo trastocar la vida de cualquiera. En fin. Muchos saludos Areli. Te felicito. Además de una bellísima voz, tu sensibilidad contagia. Profesionales así, es lo que la radio necesita. Que no deformen nuestra hermosa lengua. Un abrazo y un beso. Saludos.