martes, 5 de enero de 2010

EL AÑO BICENTENARIO

Todo es Bicentenario... El viaducto, la calle, la avenida, la ciclopista, la rosca bicentenario, el torneo de futbol bicentenario; el concierto bicentenario, el monumento bicentenario, la carrera, el circuito, los hologramas, las estampillas postales; monedas, tazas, platos, sudaderas, las placas,...

A estas alturas mi apellido ahora será Bicentenario, mi perro será Pancholín Bicentenario y mis calzones serán de la misma marca... No exagero, el gobierno federal y el de la Ciudad de México, y todos los que puedan colgarse, no han escatimado en utilizar esta palabra para decirnos que estamos de fiesta y que hay que celebrar 200 años de la Independencia y 100 de la Revolución...

Lo que pintaba como un año de fiesta colectiva, ha iniciado con una cascada de aumentos que empañan la celebración, porque el ánimo se salió de los bolsillos...
Otra vez, creyeron que la fiesta de fin de año nos mantendría "dopados" y muy pocos nos dariamos cuenta del aumento a las gasolinas... De ahí, todo, absolutamente todo sube, aunque el flamante Secretario de Hacienda piense lo contrario y la PROFECO se desgaste en repetir que "sólo es comportamiento mixto", que aun no hay registro claro de aumentos...
No esta en mis planes ser pesimista pero son Méxicos distintos... El México que creen los políticos les pertenece y el que sobrevive la sociedad... No es presentimiento y mucho menos tengo dones de pitonisa, pero es real, el 2010 sí será un año difícil; la celebración Bicentenario podría no alcanzarnos para levantar el ánimo que esta claramente golpeado...
La crisis financiera podría ser más soportable sí vieramos a los políticos desgarrarse por nuestras necesidades y cumplirlas; si fueran capaces de evitar infartos financieros cada sexenio... Sí salir a la calle fuera seguro... Sí volver a casa fuera garantía cada día... Sí nos dijeran la verdad y sumaran las grandes ideas vinieran que donde vinieran... Sí la impunidad no fuera la constante... Ahora que también hay que ser corresponsables, sostener a este país es de ida y vuelta...
¿Qué debemos regalarle a México?,¿qué debemos regalarnos para reconstruir un mejor país?... Lo cierto es que con fiestas y discursos huecos, el Bicentenario sabrá a nada... digo yo...